Es un lunes por la mañana, y me disponga a caminar un poco, y como siempre en el móvil encima, por si recibes alguna llamada o hacer algunas fotos. El sol está saliendo en el horizonte, las vistas son preciosas, en las escolleras unos pescadores están pescando o por lo menos lo intentan.
Mi palmera favorita, sola y contemplativa a la orilla del mar, viendo pasar los minutos, las horas, los días, los meses e incluso las tormentas del mar que bañan de vez en cuando sus raíces.
Orgullosa, recia y esplendorosa se levanta la palmera
Desafiante, provocadora y bravucona, su apariencia impera
La palmera, que tan sola se encuentra
Se enorgullece en la costa nuestra
Un poco más lejano en la parte centro sur, se encuentra el Canal de Masó.
En verano nido de problemas , hoy un vergel,
Hay que mirar la parte positiva, que la negativa, se muestra sola.
Que bonita es la palmera a estas hora de la mañana, que saluda cada día al sol, moviendo sus hojas como si de un saludo fuera, el sol a lo lejos en el horizonte quiere salir y asomarse para corresponderle en su saludo diario, y decirle
Hola! Palmera...
Hola! Palmera...
El sol amaneciendo y los árboles cubriendo su luz y apariencia, entre las ramas apreciamos sus rayos que quieren penetrar y hacerse notar en el día, a lo lejos vemos otros pescadores, a los cuales les deseamos suerte en su pesca.
El agua pasa por su interior, y en la parte superior se encuentra las flores engalanando su paso, el canal de Masbó antes un estanque de aguas tanto pluviales como de las que emanan de sus tierras húmedas, lugar de desagüe por donde el agua de la acequia la Illa, desemboca directamente al mar.
En ésta época del año, parece una postal, pero es una realidad, solo hay que mirar con buenos ojos, lo bonito que es MONCOFA en esta época del año.
