Hace ya varios años, que voy hablando del picudo en las palmeras de Moncofa. Siempre intentando ir concienciando de la gran plaga que tenemos con este insecto, y advirtiendo de las graves repercusiones que puede tener para nuestro patrimonio vegetal de nuestra población, su muerte.
También he dicho en algunas ocasiones que el ayuntamiento de nuestra población ya desde el principio fue uno de los pioneros en ir tratando con productos fitosanitarios nuestras joyas vegetales, algunas de ellas de más de cincuenta años, si no son más.
Últimamente hemos podido leer el gran interés que existe en todos los partidos políticos de nuestra localidad en conservar nuestro disperso palmeral, (en la avenida Mare Nostrum, existen o existían cerca de las SETECIENTAS) y en todo el término habrá cerca de las MIL , si no es que las sobrepasan, y digo porque están otra es en que condiciones, ya muchas, muchísimas desgraciadamente muertas.
En otras ocasiones también he escrito que no es solamente problema del Ayuntamiento, ya que éste las trat y las que están muertas las cortan y destruyen, otra cosa es lo que hacen los particulares en sus propiedades particulares, y también he dicho que habria que hacer alguna normativa para protegerlas, allá donde estén.
En cierta ocasión dije que si en Moncofa se trabaja para protegerlas, y en otras localidades no, (hay poblaciones que en sus término están casi todas muertas) no solucionamos nada, y debería de ser la Conselleria con crisis o sin crisis hiciese lo de debería haber hecho ya hace muchos años dictar una normativa de obligado cumplimiento para proteger las palmeras de nuestra Comunidad y si continuamos así cada uno por su senda, al final no habrá solución.
Es penoso el verlas tan decaídas y secas, lo que antes eran verdaderas joyas vegetales insignias de nuestro progreso y reclamo turístico.
No se lo que hará TEÓFILO, con sus palmeras, alguna se murió pero ahora la mayoría las que quedan se ven en buen estado y con un tubo de plástico a su lado, que llega hasta su corona o copa.
Hacia tiempo que no pasaba por allí y no las observaba bien, creía que estarían muertas, pero no fue así sino todo lo contrario están bellas y esbeltas ya veremos hasta cuando.
Ahora el Ayuntamiento tiene más interés que nunca, y están planteando acciones novedosas, y hay felicitarles por ello como también por la convocatoria a toda la ciudadanía para motivarles a saber un poco más de la enfermedad de sus palmeras y como poderlas cuidar.
Esperamos que sea para bien.
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